EGIPTO: EL TEMPLO DE HATSHEPSUT
Próximo al Valle de las Reinas se encuentra uno de los más famosos templos, el de la reina Hatshepsut.
Hatshepsut fue una reina-faraón, 5ª gobernante de la Dinastía XVIII. Ella podía usar hasta 5 nombres, como cualquier faraón: Horus, Nebty, Horus de Oro, su nombre de nacimiento, y el nombre de coronación, que fue Maat-Ka-Ra (“El espíritu de Ra es justo”) Hatshepsut.
Su padre fue Tuthmosis I. Tuvo 3 hermanos varones que murieron de niños y solo sobrevivieron ella y su hermana mayor, Neferubity.
Se casó con su medio hermano Tuthmosis II y, al morir este, correinó con su sobrino aún niño, Tuthmosis III, preparando durante ese tiempo una especie de “golpe de estado”, con la ayuda de Hapuseneb, sumo sacerdote de Amón y Visir (único caso de alguien que tuvo esos dos puestos) –lo que le hizo tener el máximo poder administrativo, religioso y judicial de Egipto-, y Senenmut, funcionario que recibió el cargo de chaty o canciller real: se autoproclamó “Primogénita de Amón” y “Faraón del Alto y Bajo Egipto” –por lo que hubo 2 faraones gobernando simultáneamente-, y tuvo uno de los reinados más florecientes de la historia de Egipto, dedicándose a embellecer Egipto y restaurar los templos.
Según National Geographic y el famoso arqueólogo Zahi Hawass, parece que ser que tuvo una osteoporosis bastante avanzada y un tumor maligno en el abdomen que se le extendió al hueso de la cadera así como un absceso en la boca que le provocó una septicemia mortal, además de estar muchos meses con fiebre y dolores.
Su tumba está en el Valle de los Reyes, en la tumba KV20.
En una sociedad dominada por el hombre, esta mujer resultó ser una de las líderes más importantes que ha existido, siendo una de las escasas reinas-faraón que tuvo Egipto. Fue apodada como “la mujer-hombre”, asumió todos los atributos masculinos de su cargo y se hizo representar como un hombre y se añadió una barba postiza.
Durante el reinado de Tuthmosis III, las menciones a Hatshepsut fueron eliminadas y las representaciones de su figura femenina fueron sustituidas por figuras del fallecido Tuthmosis II. Sus contornos corporales femeninos fueron modificados para parecerse a los de un varón. No obstante, su legado ha llegado hasta nosotros tras varios miles de años.
(J.A.T.)