París: Catedral de Notre Dame (Elementos de la catedral)
Notre Dame es una catedral de estilo gótico y es una de las más famosas del mundo, y aunque no es la más grande de Francia, sin duda, es un icono representativo de París. Tiene 130 m. de largo por 50 m. de ancho. La altura máxima de las torres llega a los 69 m., y la de la aguja llega hasta los 96 m. Se pueden visitar las torres; pero esto requiere subir 387 escalones empinados puesto que no hay ascensor.
Se construyó en el espacio donde los primeros habitantes de París, los parisii, celebraban sus rituales y donde estuvieron enclavados edificios anteriores como un templo romano dedicado a Júpiter, una primera iglesia cristiana (siglo VI) llamada Saint-Etienne y, después, una iglesia románica.
Una placa de bronce incrustada en el suelo de la plaza constituye el “kilómetro cero” para calcular todas las distancias por carretera a partir de París.
Torre Norte: Tiene 4 campanas que repican varias veces al día.
Torre Sur: En ella se encuentra la campana mayor. Luis XIV la refundió y puso por nombre “Emmanuel”. Su peso es de 13 toneladas y su badajo, 500 kg. Solo toca en las grandes fiestas del año o con motivo de celebraciones excepcionales.
Galería de las quimeras: Su nombre proviene de las estatuas que adornan la balaustrada y se encuentran a unos 46 m. de altura. Fueron creadas por Eugène Viollet-le-Duc en el siglo XIX.
Estas criaturas imaginarias son pájaros fantásticos, animales y monstruos fabulosos de forma más o menos monstruosa y grotesca que están encaramadas a las torres. La más conocida de estas gárgolas (quimeras) es la estirga (a la izda.), que parece contemplar pensativa y sacando la lengua la ciudad.
Rosetón oeste: Consta de un medallón central –de unos 10 m. de diámetro- que representa a la Virgen con el Niño, rodeado de 3 grandes círculos concéntricos. En torno al hueco central está la serie de los 12 profetas menores, que anunciaron la Encarnación de Jesús. Los otros 2 círculos exteriores oponen en la parte alta 12 virtudes y 12 vicios y, en la parte baja, asocian las faenas del campo a los 12 signos del zodíaco. El número de 12, producto de 3 x 4 (3, símbolo de la Trinidad, 4, símbolo de lo terrestre) simboliza la Encarnación.
Galería de los Reyes: Tiene 28 estatuas de unos 3,5 m. de alto cada una, representando a 28 reyes de Judea que antecedieron la llegada de Jesucristo (obviamente no están todos). Están a unos 20 m. del suelo. En el centro de la galería podemos ver a un rey que tiene a sus pies a un león. Es el famoso «León de Judá», el símbolo de la Tribu de Judá. Según la tradición hebrea, de esta tribu eran los ancestros de David, 2º rey de Israel.
En la Revolución Francesa, las chusmas revolucionarias tomaron la Catedral de Notre Dame y, destruyeron las estatuas de los reyes de Judá e Israel creyendo que representaban las imágenes de reyes de Francia, por lo que de aquellas estatuas originales solo quedan algunos fragmentos. En el año 1977 se encontraron muchas de ellas en los sótanos de un banco de París. Actualmente los restos de aquellas estatuas se pueden ver en el Museo de Cluny.
Portal del Juicio Final: Es el del centro y es el más importante. Aquí se representa el Juicio Final como se describe en el Evangelio de San Mateo. Muestra esculturas que presentan la resurrección de los muertos saliendo de los sepulcros –con ropajes que identifican su oficio o condición para que sean juzgados por Miguel, el arcángel, quien pesa sus almas de acuerdo con la vida que llevaron en la tierra y el amor que mostraron a Dios y a los hombres. También aparecen ángeles en los extremos tocando las trompetas que anuncian que comienza el juicio, y un ángel con una balanza pesando virtudes y pecados, llevando a los elegidos hacia el cielo, a la izquierda (a la derecha de Cristo), y un demonio que lleva a los condenados al infierno, a la derecha (izquierda de Cristo), imágenes que manifiestan el pensamiento popular en la Edad Media.
Portal de la Virgen (a la izda.): Fue consagrado a la Virgen María. Este portal fue muy destrozado durante la Revolución Francesa, y reconstruido posteriormente. Aparece esculpida una escena de la Coronación de la Virgen, sentada junto al Todopoderoso, acompañada por ángeles, 2 arrodillados en los extremos y uno más coronando a la Virgen.
También están representados los Patriarcas, a los lados de un baldaquino bajo el que se encuentra el Arca de la Alianza, que contiene la Tablas de la Ley por la que Yahwéh (o Jehová) instauró la Ley de Moisés.
Asimismo, destaca la célebre estatua del siglo XIX que representa a San Denis sujetando con sus manos su cabeza cortada.
Portal de Santa Ana (a la dcha.): Hace referencia a la madre de la Virgen. La Virgen está solemnemente sentada en un trono bajo un precioso baldaquino con estructuras arquitectónicas que simbolizan la Jerusalén Celestial. En los extremos están la figura de un obispo y un escriba, y, en el lado opuesto, un rey arrodillado.
La identidad de estos personajes ha sido muy discutida. Al principio se creía que representa a los promotores (Iglesia y Estado) de la construcción de la catedral: el obispo Maurice de Sully y el rey Luis VII. Otros expertos como Alain Erlande-Brandenburg piensan que ambos personajes son del siglo VI, por lo que el rey debería ser Childeberto, pues en ese tiempo dominaban los francos.
En la parte inferior –es del periodo gótico del siglo XIII- hay un friso con la historia de San Joaquín y Santa Ana.
También aparece la estatua del obispo San Marcelo hiriendo a un dragón con su lanza.
J.A. Talz
