Este museo, existente desde el 19 de noviembre de 1819, acogía, inicialmente, todas las colecciones de los reyes de España. Su primer catálogo constaba de 311 pinturas. Su primera denominación fue la de Real Museo; poco después cambiaría a Museo Nacional de Pintura y Escultura hasta su nombre definitivo: Museo Nacional del Prado.

Posteriormente, el número de obras ha ido aumentando con cesiones o donaciones y compras, así como con colecciones de otros museos. Recibe este nombre debido a la existencia de un prado junto al actual Paseo.

En 2017 contaba con más 35.000 obras (pinturas, dibujos, esculturas, monedas y otras piezas), de las que 1.700 están expuestas. Algunos de los autores más relevantes cuyas obras están expuestas son: Velázquez, El Greco, Goya, Tiziano, Rubens, El Bosco, Zurbarán, Murillo, Rafael y Tintoretto, entre otros.

Inicialmente y según el diseño de Juan de Villanueva, encargado por Carlos III, el edificio se concibió para que fuera el Real Gabinete de Historia Natural. Después llegó la invasión napoleónica y fue utilizado como cuartel militar de caballería, quedando en estado ruinoso. Pero, el rey Fernando VII y su esposa, María Isabel de Braganza, decidieron que se restaurara y se dedicara a la pintura y a la escultura.

Tiene una superficie de algo más de 14.000 m2, divididos en 121 salas. Asimismo, tiene una biblioteca en el Casón del Buen Retiro, tan grande como desconocida, con unos 100.000 títulos.

CURIOSIDADES: En este apartado podemos mencionar varias:

Igualdad: solo hay 69 mujeres (pintoras, grabadoras, ilustradoras…) por 5.000 varones, y en los 200 años de vida no ha habido ninguna presidenta del Patronato o directora del museo.

La obra más accidentada: Durante la Guerra Civil se evacuaron las piezas del museo, y el camión que transportaba las obras de Goya, La carga de los mamelucos y Los fusilamientos del 3 de mayo, chocó en Benicarló (en 1938) con una casa que había sido bombardeada. Un trozo de la fachada cayó sobre las obras, causándoles graves daños. Décadas después fueron restauradas.

Las obras compradas más caras: Una de las más caras que se han adquirido más recientemente (2016) es Virgen de la Granada, de Fra Angélico por 18.000.000 €. La 1ª en adquirirse -mientras era el Real Museo de Pinturas– fue La Trinidad, de José de Ribera, por un montante de 20.000 reales.

Las obras más prestadas: Aunque se cree que son Las Majas (Goya), con 47.185 km de recorrido, los 2 cuadros que más veces se han prestado son Autorretrato, de Goya, que ahora mismo está en La Habana con motivo de los 500 años de la fundación de la ciudad, y Agnus Dei, de Zurbarán.

La obra más violenta: los dos cuadros Saturno devorando a su hijo (de Goya y de Rubens) y las dos Furias de Ribera. Pero hay otra obra de Rubens, El banquete de Tereo, que narra una escena brutal. Tereo, un rey tracio, se casa con la princesa ateniense Procne; pero se enamora de su cuñada, Filomena, de la que abusa. Para que ésta no lo revele le corta la lengua. Pero Filomena se cuenta a su hermana la violación a través de un bordado. Procne se venga de su esposo matando a Itis, su propio hijo. Lo trocea, lo cocina y se lo da a comer a Tereo. Cuando éste pregunta por Itis, Procne le lleva su cabeza en una bandeja.

La obra más pequeña: Carlos Ortiz de Taranco, de Federico de Madrazo y Kuntz (11 cm x 8,5 cm) y cabe en una mano.

Museo Nacional del PradoLa obra más grande: Las obras más grandes del Prado son La visión del Coloseo. El último mártir, de José Benlliure (5,61 m x 7,28 m), y Degollación de San Juan Bautista y banquete de Herodes, de Bartholomeus Strobel (2,80 m x 9,52 m).

La obra más antigua: Son los 6 murales de la Ermita de San Baudelio de Casillas de Berlanga, la “Capilla Sixtina” del arte mozárabe (1125). Son 6 fragmentos de pintura mural traspasados a lienzo.

Sala nº 13: No hay sala que lleve este número, debido a la superstición, como en tantos otros ámbitos de la vida social.

Picasso: El pintor Pablo Ruiz Picasso fue nombrado director del Museo del Prado, en 1936, durante la República. Al parecer tenía asignado un sueldo, aunque no ejerció como tal.

Temperatura: Las temperaturas de las salas se sitúan en 22º y con una humedad del 50%.

En definitiva, este es un museo de imprescindible visita, seamos o no expertos en arte, ya que, incluso los más profanos, podemos admirar el detalle, realismo y calidad de las obras expuestas.

En siguientes entradas, comentaremos algunas de las obras más importantes del museo.

J.A.T.

Agradecimientos:
ABC  
EL MUNDO
Foto cabecera: Emilio J. Rodríguez Posada, CC BY-SA 2.0

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