Casa Botines
Los dragones de Gaudí
Gaudí tuvo fijación con los dragones, salamandras, serpientes…
Uno de los primeros ejemplos lo tenemos en el dragón de la puerta de entrada de la Finca Güell, como vemos en la foto de cabecera. Está inspirado en L’Atlàntida (1877), poema épico de Jacint Verdaguer, basado en la historia mitológica de Hércules.
El poema relaciona a Cristóbal Colón con los 12 trabajos que tuvo que realizar el héroe griego. Uno de esos trabajos fue conseguir las manzanas de oro del Jardín de las Hespérides y que otorgaban la inmortalidad. El árbol era custodiado por 3 doncellas y el dragón Ladón. Gaudí asocia la Finca con el jardín mitológico y a Güell con Hércules.
En la Casa Batlló, el dragón es el tejado cubierto de escamas cuya torre está coronada por una cruz de 4 brazos.
En la Torre Bellesguard, o Casa Figueres, también podemos ver un dragón en parte superior de la estructura.
En el Park Güell nos encontramos con su emblema: un dragón o salamandra, de 2,4 m. de longitud, hecho de ladrillo rasilla y revestido de trencadís, que era una técnica que utilizaba tozos de cristal y cerámica para cubrir una superficie u objeto.
Existen diferentes versiones sobre su significado: puede representar la salamandra alquímica, que simboliza el elemento fuego; el mitológico Pitón del templo de Delfos; o bien el cocodrilo que aparece en el escudo de la ciudad de Nîmes, lugar donde se crio Güell.
La Casa Botines (León) es un dragón: la verja que rodea la casa son garras afiladas, el tejado está recubierto de escamas del espinazo, y la puerta principal, inspirada en la arquitectura azteca, es una boca monstruosa. Y en el frontal, encontramos una estatua de San Jorge lanceando a un dragón reconvertido en cocodrilo.
Los últimos dragones encontrados estaban en las ménsulas: en el interior de las agujas que rematan las cuatro torres del inmueble Gaudí camufló su animal fetiche: decenas de cabezas de dragón. Son de madera y tienen la boca semiabierta.
Según las tesis del historiador César García Álvarez, la Casa Botines es un gran dragón dormido, y…
“es el primer edificio en el que Gaudí fusionó simbólicamente una arquitectura y un animal fantástico, un antecedente de lo que haría años después en la Casa Batlló y en el Park Güell.”
Como detalle, en la 2ª planta, que recrean las viviendas originales del edificio, las estancias que se recorren siguiendo las huellas de tres dedos marcadas en el suelo por un dragón.
J.A.T.
Agradecimientos:
Foto drac Park Güell: Canaan – CC BY-SA 3.0
Foto dragón Torre Bellesguard: Pablo Alejandro Araujo Granda – CC BY-SA 2.0
Damos un especial reconocimiento y agradecimiento a Marta Sabugo, del Área de Educación, Acción Cultural y Difusión de Casa Botines, por su valiosa aportación y colaboración para el texto e imágenes de este artículo.eo Casa Botines