RIVIERA MAYA: TULUM
Estos restos arqueológicos son de los más relevantes de la zona, siendo un importante centro de culto. Según fuentes del siglo XVI, este sitio era conocido como “Zamá”, que en maya significa “mañana” o “amanecer”. Su nombre posterior –por el que hoy día es conocido- es Tulum, traducido como “muralla” o “palizada”, en alusión a la muralla que aquí se conserva.
Tiene una ubicación privilegiada y sus edificios y pinturas murales están magníficamente conservadas. Es bien conocida su muralla, que delimita al conjunto principal por sus lados norte, sur y oeste, ya que el sector oriental mira al mar Caribe; tiene 5 accesos y 2 torres de vigilancia.
El sitio está presidido por “El Castillo” (foto izda), el basamento más alto de Tulum, que conserva un templo con 3 accesos ornamentados con columnas serpentinas y dos mascarones zoomorfos en las esquinas.
Frente al Castillo hay una plataforma para danzas y al suroeste se encuentra el Templo de la Serie Inicial, donde se encontró la fecha más temprana documentada en Tulum: 564 d. JC.
Al norte se encuentra el Templo del Dios Descendente (foto dcha.) con un pequeño basamento sobre el que se construyó un edificio decorado con la imagen de esa deidad, principal elemento iconográfico de la ciudad. Los muros y la puerta no se construyeron en ángulo recto sino inclinados. Debe su nombre a que, en el nicho que hay en la parte superior de la puerta, aparece la escultura de un personaje con alas que está bajando del cielo. Su piernas están hacia arriba y los brazos hacia abajo, y tiene un tocado en la cabeza y un objeto en sus manos. Parece que se asociaba con Venus, uno de los cuerpos celestas más observado por los mayas.
Frente a este conjunto está la calzada principal, con varios edificios; el más importante es el Templo de los Frescos (foto izda.) cuyas pinturas murales retratan a una serie de seres sobrenaturales residentes en el Inframundo, que constituyen uno de los más importantes testimonios de la pintura mural maya prehispánica.
Continuado por la calzada pueden verse los palacios conocidos como la Casa de las Columnas y la Casa del Halach Uinik.
En el acceso noreste, la Casa del Cenote, documenta la importancia que dieron los mayas al culto acuático vinculado a los cenotes, y cerca de allí se observa el Templo del Dios del Viento (foto dcha.) nombrado así por su basamento circular, relacionado con Kukulcán, dios de los vientos.
Parece que la mayor parte de los edificios se construyeron entre 1200-1450, aunque para fines del siglo XVI ya no quedaban residentes.
(J.A.T.)
Agradecimiento a: Instituto Nacional de Antropología e Historia de México
Fotografía “El Castillo”: Carlos Delgado, CC BY-SA 3.0
Fotografía Templo del Dios del Viento: Carlos Delgado, CC BY-SA 3.0