Roma: Obelisco de Psamético II
(OBELISCO SOLARE / OBELISTO DE MONTECITORIO)
Está situado en la Piazza di Montecitorio frente a la Cámara Baja del Parlamento italiano. Tiene 21,80 metros de alto, y le añadimos la base, alcanza casi los 34 metros.
Al igual que el Obelisco Flaminio, viene de Heliópolis, y data de alrededor del año 600 a. JC, y hacen referencia al faraón Psamético II. Se le denomina obelisco solar ya que fue realizado en honor de RA, el dios del Sol. También fue traído a Roma por el emperador Octavio Augusto hacia el año 10 a. JC, y erigido en el Campo de Marte, donde sirvió como aguja de un colosal reloj de sol llamado Horologium o Solarium (de ahí el nombre de Obelisco de Sol (o Solare).
Al parecer, se derrumbó hacía el siglo XI, fragmentándose en varias piezas, que fueron sepultadas por escombros y desechos en el transcurso del tiempo. Posteriormente, en el siglo XVI, se encontraron los fragmentos con la campaña que el papa Sixto V inició (y que ya hemos comentado con otros obeliscos); pero volvió a perderse. Pero, a finales del siglo XVIII, se redescubrió aunque solo se pudieron recuperar 5 de sus muchos fragmentos. Lo que sirvió para restaurar este obelisco fueron los restos de la columna del emperador Antonino Pío.
Esta columna antonina fue encontrada en la Piazza di Montecitorio unos 50 años antes que el obelisco. Tenía una base muy bien tallada; pero los diferentes intentos de desenterrarla fracasaron, dejándola muy dañada. Tras ser recuperada, un incendio le provocó más daños, por lo que hubo que cortarla en varias partes que sirvieron para “parchear” lo que le faltaba al obelisco, lo que hace que éste cambie el color en diferentes partes.
La misma inscripción sobre la dedicación del obelisco al Sol por parte de Octavio Augusto que se encuentra en el Obelisco Flaminio se talló en este obelisco.
Cuando finalmente fue erigido el obelisco, se incorporó en la parte superior un globo de bronce con un agujero en cada extremo opuesto para recordar el objetivo que tenía el monumento: que hacia el mediodía un rayo de la luz del sol atravesara el agujero diametral y así marcara la fecha en el pavimento; pero fue inútil por su inexactitud. Hoy día, y desde 1998, hay nueva línea de muescas de bronce, con un propósito meramente decorativo.