La camomila, también llamada manzanilla, es una de las plantas medicinales más conocida y utilizada desde la antigüedad.
En forma de infusión y por vía oral, se utiliza para tratar problemas digestivos y nerviosos debido a sus propiedades calmantes y relajantes.
Menos conocido es el hecho de que estas propiedades son igualmente efectivas sobre la piel. Hay numerosos cosméticos destinados al cuidado de la piel que la incluyen, ya que la manzanilla deja la piel relajada.
Sí, es una hierba con muchas virtudes. En latín su nombre es “Matricaria”, que significa matriz o útero, nombre dado por sus beneficios para enfermedades ginecológicas.
No obstante nos centraremos en algunas de sus propiedades cosméticas:
Da brillo al pelo:
Aplicar manzanilla sobre pelos castaños, hace que éstos se aclaren, dando un toque rubio dorado con reflejos brillantes. Hoy en día la manzanilla es usada en muchos productos de peluquería, para aclarar los cabellos castaños o disimular las canas, a modo de tinte natural.
Efecto antiarrugas:
Aplicarnos cremas que contienen aceites esenciales de manzanilla, ayuda a prevenir la aparición de arrugas en el cutis. Se pueden aplicar en forma de crema o bien en mascarilla.
Tiene efectos calmantes sobre el cutis:
Muchas cremas faciales incluyen manzanilla por sus grandes propiedades antiinflamatorias, calmantes y suavizantes de la piel. Por ello a las mujeres con pieles sensibles, se les recomienda utilizar este tipo de cremas con manzanilla.
Elimina el picor en el cuero cabelludo:
Si tenemos problemas de descamación, bacterias, y eczemas en el cuero cabelludo, una alternativa para erradicar los síntomas, es utilizando champús que contengan manzanilla, o en su defecto mezclando nosotros mismos una infusión en el champú.