El ajedrez es más que un juego. Este es un juego-deporte que trasciende más allá del juego y más allá del deporte: el espíritu político está muy presente. Veamos algunos ejemplos:
En el pasado mes de noviembre 2018, las noticias se hacían eco de la preocupación del presidente ruso, Vladimir Putin, por el hecho de que Rusia, pese a ser el país puntero en este juego-deporte, ha perdido su hegemonía ya que, desde la Olimpiada de 2002, no ha vuelto a tener un campeón. Desde el Kremlim se interpreta un fracaso cualquier puesto que no sea el de campeón.
El punto álgido de los Campeonatos Mundiales, otra vez por sus connotaciones políticas, llegó en 1972, en lo que se conoce como el “Match del Siglo”, que tuvo lugar en Reikiavik (Islandia), entre el 11 de julio y el 31 de agosto, en plena “Guerra Fría”. Los participantes fueron: Bobby Fisher (por EE.UU.) y Boris Spassky (por Rusia) –que defendía título-, venciendo el primero y acabando con una hegemonía soviética de 24 años.
Otro de los momentos vibrantes y una de las más grandes y enconadas rivalidades que han existido en este deporte (y el deporte en general) llegaron con los enfrentamientos (una vez más, política incluida) entre Anatoli Karpov y Gari Kasparov, durante 10 años y 144 enfrentamientos. Decimos “política incluida” pues cada uno representaba una manera de entender el mundo y la política. Mientras Karpov defendía el ideal soviético del viejo régimen, Kasparov, denominado “el Hijo del Cambio”, era un abanderado de la “Perestroika” que llegó a fructificar posteriormente (impulsada por Mijail Gorbachov en aquellos momentos). Ganó Kasparov y se convirtió en el campeón más joven (tenía 22 años), encabezando la clasificación mundial hasta que se retiró en 2005. Llegó a denominarse “La Perestroika sobre un tablero de ajedrez”.
Las personalidades de ambos también eran diferentes: Karpov era frío, educado y sosegado mientras que Kasparov era joven, intranquilo, apasionado y muy gesticulante en las partidas. El cénit de esa rivalidad se alcanzó en el Mundial de 1987 que se celebró en Sevilla. Después de 2 meses de pelea encarnizada, Karpov (que ganaba por 12-11) cometió un grave error que permitió a Kasparov ganar la partida y retener el título. Esa última partida se retransmitió en directo por RTVE y se consiguió una audiencia de más de 13.000.000 de telespectadores, fruto de la expectación de un choque que trascendía el ámbito deportivo.
Esa rivalidad seguía fuera de las partidas. Una muestra la tenemos durante el torneo de Linares: cada uno trataba de llegar antes al comedor del hotel para quitar la mesa favorita del otro. No obstante, en una entrevista en 1994 ofrecida por Canal Sur TV ambos se alabaron mutuamente, reconociendo que sus logros cobraban mayor valor gracias al potencial de su rival. En 2007, Kasparov fue encarcelado como opositor a Putin, y Karpov intentó visitarlo aunque no se lo permitieron.
Hemos de decir que Kasparov también se ha enfrentado a computadoras y programas de ajedrez. Fue derrotado por Deep Blue, una supercomputadora desarrollada por IBM, siendo la primera que derrotó a un campeón mundial vigente, con un ritmo de juego lento. Ocurrió el 10 de febrero de 1996. Finalmente, en las siguientes partidas, Kasparov ganó 3 y empató 2, derrotando a Deep Blue por 4-2.
Kasparov se quejó, criticando que no fue “limpia” la actuación de IBM, especialmente en la 2ª partida. Kasparov, jugando con piezas negras, sacrificó un peón para conseguir una posición de ventaja y poder contraatacar. Lo hizo creyendo que la máquina, como la mayoría de los programas de aquella época, aceptaría ese movimiento. Deep Blue no lo aceptó, por lo que Kasparov supuso que entró en juego el “factor humano”. Solicitó los registros escritos de los procesos de la máquina y, aunque IBM aceptó hacerlo, finalmente no lo hizo. Ante esto, Kasparov denunció que todo había sido un montaje con fines propagandísticos y no científicos.
Posteriormente, en mayo de 1997, la nueva versión llamada Deeper Blue, derrotó a Kasparov en un choque a 6 partidas, ganando la computadora 3,5-2,5, siendo la primera computadora en vencer a un campeón mundial con un ritmo de juego de torneo estándar.
J.A.T.
Agradecimiento foto Karpov-Kasparov (Mundial de 1985): De Copyright 2007, S.M.S.I., Inc. – Owen Williams, The Kasparov Agency. – http://www.kasparovagent.com/photo_gallery.php, CC BY-SA 3.0