«El Cid» (1961)
Este extenso film idealiza la historia del caballero castellano Rodrigo Díaz de Vivar, conocido como El Cid, sobrenombre dado por los árabes (Sidi) y que significa “Señor”.
Fue dirigida por Anthony Mann (sobrino del político ruso León Trotski), quien recibió la oferta del productor Samuel Bronston. Esta superproducción tuvo mucho éxito gracias a la grandeza visual del espectáculo, grandes actores conocidos y la excelente banda sonora de Miklós Rósza. Recibió 3 Nominaciones a los Premios Óscar: Mejor Dirección Artística, Mejor Banda Sonora Original y Mejor Canción. También tuvo 3 Nominaciones a los Globos de Oro, entre ellos a la Mejor Película Dramática.
Esta película es una de las favoritas del director Martin Scorsese, quien la calificó como “una de las películas épicas jamás hechas». De hecho, Scorsese fue uno de los principales impulsores de la restauración y relanzamiento de “El Cid” en 1993. También el presidente Kennedy fue un entusiasta del film y, en especial, del protagonista (Charlton Heston), a quien invitó a la Casa Blanca para que le hablara de El Cid. El crítico Miguel Ángel Palomo del diario El País, definió magistralmente esta película:
«Aunque falsea la historia a su antojo y está llena de anacronismos, mantiene buena parte de su esplendor y fascinación, recreando la historia medieval con un estilo que adopta ciertos códigos del western.»
Pese a incurrir en diversas contradicciones históricas -muy propio del cine del Hollywood-, contó con el asesoramiento histórico de Gonzalo Menéndez Pidal, hijo de Don Ramón, famoso historiador que tanto investigó y escribió sobre la historia de El Cid, y que visitó el rodaje de la película. Aunque pudiera parecer un error el que se utilizara la palabra “España” (cuando, en ese momento, solo había diversos reinos cristianos -León, Castilla, Aragón- podría darse validez a su uso ya que el film hace referencia al conjunto de reinos de la Península y porque “España” procede del término “Hispania” que usaron los romanos. No obstante, el film dio a conocer al mundo a este personaje, intentando destacar valores como el honor, la familia y la lealtad. Otro error es que, cuando muere El Cid, sus hijas son pequeñas; en realidad, ya eran adultas y estaban casadas.
Decíamos que grandes actores soportan esta película, destacando Charlton Heston (Rodrigo), Sophia Loren (Jimena), Herbert Lom (Ibn Yusuf), Raf Vallone (García Ordóñez), Geneviève Page (Doña Urraca), John Fraser (Rey Alfonso), Douglas Wilmer (Al-Mu’tamin), Michael Horden (Don Diego), Gary Raymond (Rey Sancho) o Ralph Truman (Rey Fernando).
La filmación de «El Cid» se realizó, básicamente, en España: Vivar, el Castillo de Belmonte (Cuenca), Ampudia y Peñíscola. Las escenas de estudio se realizaron en Roma.
La revista Time publicó algunos detalles sobre este colosal film:
- Costo: 6.200.000 dólares
- Ingreso: 26.621.000 dólares
- Pantalla panorámica extra ancha y un proceso de color especial (70 mm Super Technirama – Technicolor)
- Duración: 295 minutos, incluyendo el intermedio.
- Vestuario: 10.000 prendas
- 7.000 extras (3.500 habitantes de Peñíscola, Benicarló y Castelló, y 2.400 soldados del ejército)
- 35 barcos
- 550 caballos y jinetes (250 aportados por la Policía Armada)
- 50 enormes motores de guerra medieval
- Se usaron 4 de los castillos antiguos más nobles de España: Peñíscola (Castelló), Belmonte (Cuenca), Ampudia (Palencia) y Torrelobatón (Valladolid).
«El Cid» (1961) J.A.T.