RMS Titanic 

La reglamentación de aquel tiempo no obligaba a llevar un número de botes salvavidas para que cupieran todos los pasajeros. Así, aunque el RMS Titanic tenía capacidad para 64 botes salvavidas -que podían contener 65 personas cada uno-, solo llevaba 16 y 4 balsas plegables. Aún llenos al máximo eran insuficientes para los más de 2.200 pasajeros. Sólo los 16 botes pudieron salvar a pasajeros, y, de ellos, solo 2 regresaron para salvar del mar a otros pasajeros: 9 pasajeros fueron rescatados, de los que murieron, posteriormente, 3. Hay que añadir que los botes no fueron utilizados hasta el máximo de su capacidad.

El Carpathia, el barco que los ayudó, se encontraba a algo más de 90 kilómetros de distancia, lo que llevaría unas 5 horas. Aunque incrementó su velocidad en 3,5 nudos más, tardó en llegar 3,5 horas. Al aumentar la velocidad, también corría el mismo riesgo que el RMS Titanic, por lo que incrementó el número de vigías.

Cada 15 minutos iba lanzando bengalas para que lo vieran los supervivientes y darles alguna esperanza.

También preparó los salones para que sirvieran de hospitales improvisados, con mantas y ropa, así como comida y bebida caliente.

En 5 horas había recogido a todos los supervivientes de sus botes salvavidas.

El capitán Arthur Rostron, que contó con la colaboración de la famosa Molly Brown, registró los nombres de los supervivientes y los comunicó por radio a puerto para tranquilizar a sus familiares.

Desafortunadamente, el Carpathia sirvió durante I Guerra Mundial, y el 17 de julio de 1918, después de zarpar de Liverpool, fue hundido por 2 torpedos del submarino alemán U-55.

Sí es cierto que había un barco más cercano, el Californian, a unos 50 km de distancia; pero, por razones nunca confirmadas, no acudió en su ayuda. Aunque en la lejanía vieron lanzarse 5 bengalas, tanto el 2º Oficial como el Capitán coincidieron en que no eran señales de socorro, por lo que parecían pertenecer a otro barco. De hecho, pensaban que eran cohetes de celebración ya que eran blancas, en vez de las rojas que indican una solicitud de auxilio. A esto se añade que la radio estaba apagada, pues las reglas de navegación de entonces no obligaban a llevar radio, y, lógicamente, mucho menos a tenerla encendida las 24 horas.

Ya por la mañana, el capitán pidió al operador de radio, Cyril Evans, que averiguara qué noticias había, y en ese momento Evans se enteró de lo sucedido al RMS Titanic. El capitán Lord ordenó dirigirse rápidamente a la zona del hundimiento, y cuando llegaron, a las 8:40 de la mañana, el Carpathia ya había recogido a los supervivientes.

Durante la I Guerra Mundial, el Californian fue hundido en 1915 por un submarino alemán en las costas de Grecia.

J.A.T.