HALLOWEEN Y EL DÍA DE TODOS LOS SANTOS
Del 31 de octubre al 2 de noviembre tiene lugar 3 festividades :
- 31-octubre: Víspera de Todos los Santos (Halloween)
- 1-noviembre: Día de Todos los Santos
- 2-noviembre: Día de los Difuntos
31 de octubre. A esta festividad, proveniente del otro lado del “charco”, se le llama Halloween, contracción de All Hallow´s Eve, es decir, de Víspera de Todos los Santos.
1 de noviembre: El Día de Todos los Santos, es una fecha religiosa que conmemora o recuerda a todos los santos, conocidos y desconocidos.
2 de noviembre: Día de Todos los Fieles Difuntos, cuyo objetivo es orar por aquellos fieles que han acabado su vida terrenal y, en el caso católico, por quienes se encuentran aún en estado de purificación en el Purgatorio. La celebración se basa en la doctrina de que las almas de los fieles que al tiempo de morir no han sido limpiadas de pecados veniales, o que no han hecho expiación por transgresiones del pasado, no pueden alcanzar la Visión Beatífica, y que se les puede ayudar a alcanzarla por rezos y por el sacrificio de la misa.
Estas festividades, de hace 3.000 años, provienen de la fiesta llamada Samhain, que se celebraba en el solsticio de otoño, dándole la despedida al dios del Sol, Lugh, y mostraba la importancia que los celtas tenían por el recuerdo de los difuntos.
Cuando los romanos ocuparon los dominios celtas asimilaron muchas cosas, entre ellas, esta festividad. Aunque ya se celebraba en los últimos días de octubre y primeros de noviembre una festividad conocida como la «fiesta de la cosecha», en honor a Pomona (diosa de los árboles frutales), se mezclaron ambas tradiciones.
En el ideario de la Iglesia Católica estaba aceptar a todos los paganos “cristianizando” sus festividades paganas.
Siglo II. los supuestos cristianos empezaron a honrar a los que habían sufrido martirio por su fe y, creyendo que ya estaban con Cristo en el cielo, les pedían en oración que intercedieran a su favor.
13-mayo 609 (o 610). El papa Bonifacio IV consagró el Pantheon, el templo romano dedicado a todos los dioses, a María y a todos los cristianos mártires.
731-741. El papa Gregorio III consagró una capilla en Roma dedicada a todos los santos, estableciendo el 1 de noviembre como día de dicha honra, aunque en Inglaterra ya se celebraba por influencia celta. New Catholic Encyclopedia registra, en este sentido que “los irlandeses solían destinar el primer día del mes a fiestas importantes, y como el 1 de noviembre era también el comienzo del invierno celta, sería una fecha apropiada para una festividad dedicada a todos los santos.”
835. El papa Gregorio IV la convirtió en fiesta universal.
Pero, en tiempos más antiguos, pueblos primitivos de lugares tan dispares como Australia, Egipto, Fiji, Perú o México conservaron, en la celebración de una “fiesta en honor de los muertos”, que se celebraba en noviembre, un posible vestigio de la tradición del Diluvio. Estas costumbres rememoraban de alguna forma la aniquilación ocasionada por el Diluvio universal de tiempos de Noé. Veamos algunas referencias:
El libro Life and Work at the Great Pyramid indica que, en México, la fiesta se celebraba el 17 de noviembre debido a que “la tradición decía que en esa fecha el mundo había sido destruido con anterioridad, y ellos temían que al fin de un ciclo una catástrofe similar aniquilase a toda la raza humana”.
El libro The Worship of the Dead dice:
“Esta festividad [de los muertos] se […] celebraba en o en torno a la misma fecha en la que, según el relato de Moisés, tuvo lugar el Diluvio, es decir, el día 17 del segundo mes, mes que corresponde más o menos con noviembre.”
Cabe mencionar que, efectivamente, la Biblia expone que el Diluvio dio comienzo “el segundo mes, en el día diecisiete del mes”. (Gé 7:11.) Ese “segundo mes” corresponde a final de octubre e inicio de noviembre de nuestro calendario.
The Encyclopædia Britannica también expone que las muchas costumbres unidas a esta festividad tienen un trasfondo pagano:
“El año céltico concluía el 31 de octubre, la víspera de Samhain, y se celebraba con ritos religiosos y agrarios. Para los druidas, Samhain era tanto “el fin del verano” y una festividad para los muertos… Hay poca duda de que la iglesia cristiana procuró eliminar o suplantar la festividad druida de los muertos introduciendo la observancia sustitutiva del Día de Todos los Santos el 1 de noviembre. Esta festividad se estableció para honrar a todos los santos, conocidos o desconocidos, pero no pudo desplazar la celebración pagana de Samhain.”
Los celtas creían que, como los días se iban haciendo más cortos, era necesario reavivar al Sol con una serie de ritos y sacrificios. Como símbolo de la desaparición del año viejo, se apagaban todos los fuegos y, para inaugurar el año nuevo, se encendían hogueras sagradas de las que todos los miembros de la comunidad tomaban brasas para volver a prender la lumbre de sus hogares. HALLOWEEN
Los celtas creían que, durante la fiesta de Samhain, se abría el velo que separaba el mundo humano del sobrenatural y los espíritus, buenos y malos, vagaban por la Tierra. Como se pensaba que las almas de los muertos regresaban a sus casas, las familias sacaban comida y bebida para sus visitantes fantasmales con la esperanza de apaciguarlos y protegerse del mal.
Como la gente creía que habían desaparecido las barreras entre el mundo físico y el sobrenatural, pensaba que los seres humanos podían pasar con facilidad al mundo de los espíritus. De modo que Samhain era una ocasión sumamente propicia para desentrañar los secretos del futuro.
Por ello, la Iglesia, para atraer a los paganos sin que tuvieran que renunciar a sus costumbres, decidió aceptar sus costumbres y “cristianizarlas” asociándolas a ejemplares figuras y personajes cristianos. Así lo apoya The Encyclopedia of Religion:
“La festividad cristiana, el día de Todos los Santos, conmemora a los santos conocidos y desconocidos de la religión cristiana, tal como la fiesta de Samhain reconocía y rendía homenaje a las deidades celtas”.
Así, esta celebración, como otras muchas, no tiene un origen cristiano sino, más bien, pagano y, ésta en concreto, su origen es celta.
J.A.T.
