La masacre de Munich fue un atentado terrorista ocurrido el 5 de septiembre de 1972, durante los Juegos Olímpicos de Munich, y perpetrado por la organización terrorista palestino Septiembre Negro, en el que 11 atletas y entrenadores israelíes fueron secuestrados y asesinados.

Atletas israelíes

Entre sus peticiones estaban la liberación de 234 prisioneros alojados en cárceles israelíes, y la liberación de Andreas Baader y Ulrike Meinhof, fundadores de la Fracción del Ejército Rojo, conocida como Banda Baader-Meinhoff, encarcelados en Alemania. Lo cierto es que Israel no iba a negociar con los terroristas.

Fueron pasando las horas negociando las reivindicaciones terroristas, y aunque dieron un plazo de 3 horas, al final, lo ampliaron otras 6 horas más. Aunque Alemania decía liberar a Andreas Baader y Ulrike Meinhof, Israel no cedería. Con engaños, las autoridades alemanas los convencieron de que serían repatriados a Egipto, por lo que dispuso 2 helicópteros para el traslado hasta el aeropuerto, y allí, un equipo de francotiradores los abatiría.

Una vez allí los terroristas se dieron cuenta de la trampa y en el fallido intento de rescate de los rehenes en el aeropuerto, la policía abatió a 5 terroristas y detuvo a 3, aunque para ese momento, los terroristas ya habían disparado a los rehenes -atados- de uno de los helicópteros y lanzando una granada contra el otro helicóptero muriendo en resto de rehenes.

En los primeros momentos hubo una gran confusión ya que el gobierno alemán anunció que los rehenes habían sido liberados y los terroristas abatidos, provocando la alegría del Estado de Israel que llegó a felicitar a las familias de los rehenes. Pero, poco a poco se volvió a la más cruda realidad, y a las 03:24 h del día 6, se confirmaba que 2 atletas israelíes habían sido asesinados en la villa olímpica y que los otros 9 fueron ejecutados en el aeropuerto.

Golda Meir

Los Juegos Olímpicos continuaron, aunque al día siguiente, el día 7, el equipo olímpico de Israel se retiró, al igual que el equipo egipcio antes el temor a posibles represalias.

Este acto de barbarie hizo que la primer ministro israelí, Golda Meir, pidiera que las naciones condenaran el acto, lo que hicieron numerosas naciones incluida la Jordania del rey Hussein I.

Escudo del GSG9

Por otra parte, los cuerpos de los 5 terroristas abatidos fueron inhumados en Libia con honores militares, mientras que los otros 3 fueron encarcelados en Alemania, creándose el GSG9, unidad de operaciones especiales anti-terroristas, para futuros casos.

8 de septiembre de 1972: La fuerza aérea israelí bombardea los campamentos base de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en el Líbano y Siria.

29 de octubre de 1972: El vuelo 615 de la compañía Lufthansa es secuestrado al objeto de que los 3 terroristas encarcelados en Alemania fueran liberados. Sin consultar con Israel, Alemania los liberó y recibieron asilo en la Libia de Muammar Gadafi. Israel criticó la actuación de Alemania, acusándola de “capitular ante al terrorismo”, saliendo numerosas teorías como las del acuerdo secreto para que no hubiera más ataques terroristas en suelo alemán.

Esto provocó una enorme espiral de violencia, ante la decisión de Israel de vengar el atentado sufrido. En una próxima entrada analizaremos las represalias de Israel antes este suceso.

Hay una placa conmemorativa en el edificio (ver foto de cabecera) donde se alojaban los atletas israelíes tiene la leyenda:

“En este edificio vivió durante los XX Juegos Olímpicos de Verano el equipo de Israel del 21 de agosto al 5 de septiembre de 1972. El 5 de septiembre fallecieron por muerte violenta [lista de las víctimas]. Honor a su memoria.”

J.A.T.

Agradecimiento imagen cabecera: ProhibitOnions, CC BY-SA 3.0
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