La masacre de Munich, que comentamos en una anterior entrada, provocó una enorme espiral de violencia, ante la decisión de Israel de vengar el atentado sufrido.
Para ello, la primer ministro israelí, Golda Meir, ordenó al Mossad, el servicio de inteligencia israelí, la eliminación de los planificadores y perpetradores de la matanza allá donde estuvieran. Así nació la conocida como Operación Cólera de Dios (Mivtzah Za’am Hael, en hebreo), cuyo responsable fue el agente Michael “Mike” Harari, conocido como el “Vengador de la masacre de Múnich” o “El James Bond sionista”, según el diario israelí Haaretz, llevando la pistola Beretta que utiliza el famoso Agente 007 literario, James Bond. Se contaría con un concepto clave: “negación plausible”, es decir, que fuera imposible conectar esas muertes con Israel, al tiempo que despertara el pánico entre los terroristas palestinos. Harari creó la unidad Kidon cuya misión era matar, en cualquier país del mundo, a los que cometieran atentados contra Israel.
Harari también ayudó a preparar la famosa Operación Thunterbolt (Operación Trueno) para rescatar a los pasajeros de un vuelo secuestrado y desviado a Uganda en el año 1976, que comentaremos en otra entrada.
Se elaboró una lista de objetivos relacionados, que fueron “eliminados”:
16 de octubre de 1972: Wael Aadel Zwaiter, sospechoso de pertenecer a Septiembre Negro y representante oficial de la OLP en Italia, recibió 12 disparos. La muerte de Zwaiter fue seguida de atentados con cartas bomba, sin víctimas mortales, contra representantes de la OLP en Argelia y Libia, contra palestinos en Bonn (Alemania) y Copenhague (Dinamarca), y contra un representante de la Cruz Roja en Estocolmo (Suecia).
8 de diciembre de 1972: Mohammad Hamshiri, representante de la OLP en París, fue asesinado mediante una bomba activada por control remoto, la cual estaba instalada en su teléfono. Cuando llamaron los agentes israelíes y Hamshiri descolgó el auricular, la hicieron detonar. En los tres meses siguientes, cuatro integrantes de la OLP y la FPLP fueron asimismo asesinados en Chipre, Grecia y París.
24 de enero de 1973: El Mossad detonó una bomba colocaba bajo la cama de Hussein Al-Bashir, en su habitación del Hotel Olímpic de Nicosia (Chipre).
6 de abril de 1973: Basil A-Kubaisi, sospechoso de proporcionar armas a Septiembre Negro, 2 agentes israelíes le dispararon 12 veces mientras regresaba a casa después de cenar.
9 de abril de 1973: Israel inició la Operación Primavera de Juventud en Beirut (Líbano). Los objetivos eran Muhammad Yusuf al Najjar (Abu Yusuf), Kamal Adwan y Kamal Nasser, todos ellos importantes dirigentes de la OLP. Un comando israelí del Sareyet Matkal (unidad antiterrorista) desembarcó en una playa desierta del Líbano, dirigiéndose después a Beirut, donde acabaron con la vida de los tres palestinos, cuatro civiles libaneses, tres turistas sirios y un italiano, dejando 29 personas más heridas. A continuación, volaron el cuartel general del FPLP en la ciudad y una fábrica de explosivos de Al-Fatah.
28 de junio de 1973: el argelino Mohammad Boudia, encargado de las operaciones de Septiembre Negro en Europa, fue asesinado mediante un coche bomba en París.
21 de julio de 1973: Tuvo lugar el conocido como Asunto de Lillehammer. Un equipo de agentes del Mossad mató en Lillehammer (Noruega) a Ahmed Bouchiki, un marroquí sin relación alguna con los hechos acaecidos en Múnich, después de que un informador del Mossad le confundiera con Alí Hasan Salameh, integrante de Septiembre Negro. Seis agentes israelíes, incluyendo dos mujeres, fueron capturados por las autoridades noruegas, y 5 de ellos fueron juzgados y encarcelados. Tras 22 meses de prisión serían liberados y deportados a Israel. Durante 23 años, Israel negó tener responsabilidad, aunque en febrero de 1966 indemnizó a la familia del asesinado. Esto error motivó que Mike Harari presentara su dimisión.
22 de enero de 1979: el servicio secreto israelí dio finalmente con el paradero de Alí Salameh, asesinándole con un coche bomba, en Beirut. La onda expansiva también mato a 4 transeúntes e hirió a otros 18.
3 de julio de 2010: Mohammed Daoud Oudeh, alias Abu Daoud (el principal instigador del ataque terrorista de Múnich), murió en el Hospital Al Andalus de Damasco (Siria), debido a una insuficiencia renal. Aseguró que no sentía remordimientos sobre la operación porque consideraba que los atletas israelíes, como los reservistas militares, eran blancos legítimos. Pero afirmó que el propósito no era matar a los israelíes, sino utilizarlos como moneda de cambio para liberar a más de 200 palestinos encarcelados en Israel.
En 1984, el periodista canadiense George Jonas, escribió la obra “Venganza: La verdadera historia de un equipo antiterrorista israelí”, contando la historia desde el punto de vista del líder de la unidad, cuyo seudónimo es Avner. No obstante, esta versión no ha sido verificada por otras fuentes. Algunos miembros del Mossad, participantes en la operación, indican que no es acertado el relato de Avner. Aún así, el libro ha sido un best-seller tanto en las de ficción como de no ficción.
En base a la obra se realizaron 2 películas:
- La espada de Gedeón (Michael Anderson)
- Munich (Steven Spielberg). En 2006, el director tuvo que salir al paso de las duras críticas de la comunidad judía en EE.UU., pues, según ellos, humanizaba demasiado a los miembros de Septiembre Negro al tiempo que mostraba crudamente a los agentes del Mossad como asesinos. Spielberg se defendió diciendo: “Si fuera necesario, estaría dispuesto a morir, tanto por Estados Unidos como por Israel.” “Tratar de entender a los terroristas no significa justificarlos”, pues «entender no significa perdonar” ni tampoco ablandarse por ese acto, sino que es una «posición valiente» frente a lo ocurrido.”
J.A.T.