Las «Primeras Damas» de los EE.UU. (1789-1809)
Nombre: Martha Dandridge Custis Washington
Matrimonio: Enero de 1759
Presidente: George Washington
Período: 30/04/1789 – 4/03/1797
Comentarios: Ella se opuso a la elección de su esposo como Presidente de los Estados Unidos de América, y se negó a asistir a la inauguración (30/04/1789); pero con gracia cumplió sus funciones como anfitriona oficial del estado durante sus 2 mandatos. Murió 2 años después que su esposo.
Nombre: Abigail Smith Adams
Matrimonio: Octubre de 1764
Presidente: John Adams
Período: 4/03/1797 – 4/03/1801
Comentarios: Fue la 1ª Segunda Dama (esposa del Vicepresidente) antes de convertirse en Primera Dama. En 1774 inició una prolífica correspondencia con su marido, quien trabajaba en el Congreso Continental en Filadelfia; ella describía la vida cotidiana y abordaba asuntos públicos durante la Guerra de Independencia con ingenio y agudeza política. Siempre fue considerada una influyente consejera. Murió de fiebres tifoideas.
Nombre: Martha Wayles Skelton Jefferson
Matrimonio: Enero de 1772
Presidente: Thomas Jefferson
Período: —–
Comentarios: No llegó a convertirse en Primera Dama de los Estados Unidos debido a que falleció (con 33 años) unos 19 años antes de que su esposo fuese elegido como Presidente. Aun así, la Casa Blanca y la Biblioteca de las Primeras Damas la considera como tal. Se desconoce si recibió una educación formal; pero se convirtió en una dama educada, con conocimientos y notable capacidad para tocar el pianoforte y el clavicordio. Su hija, Martha Jefferson Randolph, asumió los roles de anfitriona en la Casa Blanca y Primera Dama extraoficial durante el mandato de su padre; si ella no estaba disponible, el papel recaía sobre Dolley Madison, esposa de James Madison, quien era entonces Secretario de Estado.
Nombre: Dolley Payne Todd Madison
Matrimonio: Septiembre de 1794
Presidente: James Madison
Período: 4/03/1809 – 4/03/1817
Comentarios: También actuó como Primera Dama durante el mandato de su antecesor, Thomas Jefferson, por ser éste viudo. Su estilo icónico y su presencia social impulsaron la popularidad de su esposo como presidente. Fue una de las mujeres más importantes en los círculos sociales, y de las más queridas de la Casa Blanca. Siempre se llamaba a sí misma Dolley. Su elegancia a la hora de vestir hizo que una cronista social de Washington dijera que “parecía una reina. Sería absolutamente imposible que alguien se comportara con mayor perfección que ella.”
J.A.T.
Agradecimiento: www.whitehouse.gov/1600/first-ladies