Loreena McKennitt

Lullaby

Este poema, titulado “Lullaby” (“Nana”), está interpretado por Loreena McKennitt, cantante canadiense de ascendencia irlandesa y escocesa. Dio este título al fragmento titulado Prólogo al Rey Eduardo IV”, que extrajo de Poetical Sketches” (1783), una de sus primeras obras del poeta, pintor y grabador británico del siglo XVIII, William Blake.

Según el periódico The Guardian, “William Blake es, de lejos, el mayor artista que Gran Bretaña ha producido”.

Este es un fragmento de Augurios de inocencia”:

Pero, volviendo al poema que nos ocupa, ¿qué quiso expresar el poeta? ¿Un campo de batalla, o el Infierno en la tierra? Veamos cuál es el texto de “Lullaby”:

Siendo un aprendiz de pintor, Blake solía recorrer Londres dibujando bocetos de las iglesias góticas que veía, dando especial interés a los grabados de las tumbas “reales”, lo que llevó a una de sus primeras obras (que comentamos al principio), Poetical Sketches”, uno de cuyos fragmentos es usado por Loreena McKennitt para “Lullaby”. En sus primeros acordes suena la melodía de una antigua canción de cuna que se va diluyendo para dar paso al sonido de una tormenta que se aproxima.

Aquí, para William Blake, la guerra se ha transformado en una visión dantesca y apocalíptica en la que miles de seres humanos son arrastrados por fuerzas superiores hacia a vorágine de muerte y violencia.

William Blake 

En este poema, Blake clama al Cielo contra la sinrazón de la guerra y señala como culpables a los autoproclamados “agentes de Dios” (reyes, nobles y obispos) arrojando al pueblo a la mutua destrucción. La razón es que los nobles y el clero, por tradición, justifican conseguir poder como procedente de la gracia y voluntad divina. Por ello, Blake apunta a estos como los culpables de las masacres: Thy Ministers have done it!” (“¡Tus ministros lo han hecho!”).

‘Elohim creando a Adán’, de William Blake

La obra literaria y gráfica de Blake se basa en una serie de visiones fantásticas de tal fuerza que el texto está considerado como uno de los más estremecedores alegatos anti-belicistas de la Historia: ¡Oh quien tuviera una voz como el trueno, y una lengua para atenazar la garganta de la guerra!». El sentimiento de horror que nos describe puede corresponder a cualquier batalla de la historia del hombre: en la antigua Grecia o Roma, las guerras de la Edad Media, o la I y II Guerra Mundial. En este caso, Blake pone el poema en el contexto de la Guerra de las Dos Rosas, que marcó un punto de inflexión en la Inglaterra de la Baja Edad Media.

Este enfrentamiento recibe el nombre, producto del Romanticismo, en alusión al emblema de las dos casas que lo protagonizaron: la Casa de York (rosa blanca -a la izda.-) y la Casa de Lancaster (rosa roja -a la dcha.-), ambas familias pretendientes al trono de Inglaterra por su origen común en la Casa Plantagenet.

Rosa Tudor

La Guerra de las Dos Rosas significó la extinción de ambas casas y debilitó a la nobleza inglesa, y generó un gran descontento social. Inició el declive de la influencia británica y el debilitamiento del poder feudal de los nobles. dando paso al Renacimiento: la aristocracia quedó sumida en la ruina, los comerciantes tomaron el poder, y surgió de las cenizas una monarquía centralizada bajo la dinastía de los Tudor, fundada por Enrique VII (Enrique Tudor) -proveniente de la Casa de Lancaster– y casándose, el 18 de enero de 1486, con Elizabeth de York, uniendo así las 2 casas, con un nuevo símbolo, la Rosa Tudor, unión de la rosa roja de Lancaster y la blanca de York.

Este conflicto bélico, como otros muchos de la historia, ha servido de base para cantares, romances y novelas. Las obras más importantes y conocidos sobre este suceso son:

  • Enrique VI: Esta obra histórica fue escrita por William Shakespeare en 1594. Uno de sus versos relata:

La flecha negra: Esta clásica novela histórica fue escrita por Robert Louis Stevenson en 1888. Su título original era La Flecha Negra: un relato de las Dos Rosas”, y fue publicada como folleto con el pseudónimo de Capitán George North.
  • Canción de Hielo y Fuego (A Song of Ice and Fire): El escritor norteamericano George R. R. Martin empezó a escribir -desde 1996– esta serie de 7 novelas de fantasía en la que hay una lucha por el poder entre la Casa Lannister (por Lancaster) y la Casa Stark (por York) tras la muerte sin descendencia de un rey de la Casa Baratheon (Plantagenet).
      1. Juego de Tronos (1996)
      2. Choque de reyes (1998)
      3. Tormenta de espadas (2000)
      4. Festín de cuervos (2005)
      5. Danza de dragones (2011)
      6. Vientos de invierno (en desarrollo)
      7. Sueño de primavera (pendiente)

    La aclamada serie de TV realizada por la HBO, Juego de Tronos (Game of Thrones), se basa en los primeros 5 tomos. Esta serie de novelas se considera una de las obras más innovadoras por su falta de censura en temas de violencia y sexo, el gran número de personajes que aparecen y su complejidad, así como por la incertidumbre sobre qué va a pasar con esos personajes, muriendo tanto personajes principales como secundarios y volviendo a aparecer. Para agosto de 2018 se habían vendido 90.000.000 de copias de las novelas, traducidas a 47 idiomas.

    J.A.T.

    Agradecimiento imágenes:
    Loreena McKennitt: Małgorzata Skibińska, CC BY-SA 4.0
    Rosa blanca de York – Sodacan, CC BY-SA 3.0
    Rosa roja de Lancaster – Sodacan, CC BY-SA 3.0
    Rosa Tudor: Sodacan, CC BY-SA 3.0
    Canción «Lullaby»: Youtube