Si se hiciera la pregunta de cuál es el violín más caro del mundo, el 90% diría que un Stradivarius. Y parecería lógico pues 7 de los 8 violines más caros los fabricó Antonio Stradivarius. Y hasta ahora, el violín más caro del mundo era el Stradivarius “Lady Blunt”, de 1721, por el que se había pagado la cantidad de 11.000.000 de euros en 2011 en una subasta virtual. Destacaba por su perfecta conservación y con su barniz aún brillante, como recién fabricado. Parece lógico ya que, durante sus primeros 100 años, jamás salió de su estuche. El “Lady Blunt” recibe su nombre de la nieta de Lord Byron, Anne Blunt, quien lo tuvo en propiedad durante 30 años.
Pese al importe tan elevado, no es el instrumento de Stradivarius más caro. El Patrimonio Nacional de España tiene el conocido “Cuarteto Real” (The Royal Quartet) o “Cuarteto Palatino”, compuesto de 2 violines (uno pequeño y otro grande), una viola y violonchelo, estimándose que, si se vendiera la viola, su precio rondaría los 100-140 millones de euros.
Antonio Stradivarius, que empezó a fabricar instrumentos de cuerda desde los 16 años, fabricó alrededor de 1.200 violines, violas y violonchelos, de los que se conservan unos 650 ejemplares, de los cuales unos 450 son violines. Estos eran más alargados y más estrechos que los normales. A esto se unía lo que le hace diferente: un sonido especial y peculiar, diferente al de otros fabricantes o lutieres, y que, al parecer, estaba relacionado con una fórmula desconocida en su barniz.
Sin embargo, en 2013, se batió ese récord cuando un comprador anónimo, y por un precio que no se desveló, lo adquirió. El violín en cuestión fuer el “Vieuxtemps” de Guarneri del Gesù. Fue construido en 1741. En 2010 ya se puso a la venta por un precio de 18.000.000 de dólares aunque esto no cuajó. Este fantástico instrumento está considerado la “Mona Lisa de los violines”.
Lo que también es noticia relevante es el hecho de que el nuevo propietario ha cedido el instrumento, de por vida, a la violinista estadounidense, de ascendencia japonesa, Anne Akiko Meyers, quien ya tiene 2 Stradivarius: “Royal Spanish”, de 1730, comprado en 2005, y el “Molitor”, de 1697, comprado en 2010 por 3.600.000 dólares.
J.A.T.