El conocido como “Santo Grial” ha sido el argumento de la mayoría de las leyendas que aparecieron en los siglos VII-VIII, durante la Edad Media. Se consideraba que era la copa que Jesucristo usó en la Última Cena y con la que el discípulo José de Arimatea recogió la sangre de Cristo.
Hemos de decir que ni la Biblia ni siquiera los textos apócrifos hacen referencia al Santo Grial. Básicamente, los caballeros de las leyendas artúricas lo buscaron. El arqueólogo y aventurero Indiana Jones lo buscó en su 3ª entrega: “Indiana Jones y la última cruzada”, para impedir que los nazis lo consiguieran.
Pero, en realidad, fueron los supersticiosos nazis quienes buscaron objetos y reliquias que les, presumiblemente, les otorgaran el poder para establecer su Reich de 1.000 años. Curiosamente, el aventurero y arqueólogo Indiana Jones, llevado al cine por Steven Spielberg, pugna con sus enemigos, los nazis, para evitar que estos se lleven reliquias que pudieran darles poder para dominar el mundo: el Arca de la Alianza (en la 1ª entrega) y el Santo Grial (en la 3ª, La última cruzada)
Y es que es bien conocida la inclinación ocultista y esotérica de los más importantes líderes nazis (Heinrich Himmler, Richard Walther Darré, Rudolf Hess y Alfred Rosenberg). De hecho, el nazismo era una ideología con gran contenido esotérico. La Sociedad Thule fue una organización esotérica fundada por el alemán Rudolf von Sebottendorff. Se le considera como la madre espiritual del nazismo, y a dicha organización perteneció Rudolf Hess como miembro permanente, y como miembros visitantes, Dietrich Eckart, Gottfried Feder, Adolf Hitler y Alfred Rosenberg.
Y es que Heinrich Himmler, por su interés en el ocultismo, había fundado, en 1935, la Ahnenerbe (Sociedad para la Investigación y Enseñanza sobre la Herencia Ancestral Alemana) que integró en las SS, al objeto de investigar y probar la supuesta superioridad de la raza aria, mediante hallazgos arqueológicos, y piezas y reliquias como…
Piedra de Scone (o Piedra del Destino o Piedra de la Coronación), que se halla en el Castillo de Edimburgo (Escocia). Fue símbolo nacional escocés sobre la cual fueron coronados sus reyes durante la Edad Media.
Según la leyenda, esta fue la piedra sobre la que Jacob apoyó su cabeza cuando Yahveh (Jehová) le habló en un sueño. Según la tradición, cuando Jacob despertó, la ungió con aceite y la colocó sobre un pedestal; después se llevó al Templo de Jerusalén hasta la invasión de Nabucodonosor, rey de Babilonia. Después, se cuenta que el profeta Jeremías junto con dos hijas del rey David escapó con la piedra a Egipto, y de allí fue llevada a España y luego a las Islas Británicas.
- Arca de la Alianza, el cofre sagrado que se hizo por mandato y diseño de Yahveh (Jehová), y que se ubicó en el Santísimo del tabernáculo y después se colocó en el templo de Salomón.
- Santo Grial, la supuesta copa que Jesucristo utilizó en la última cena.
De hecho, Heinrich Himmler, en su visita a España, fue a la comunidad judía de Toledo en busca del Arca de la Alianza que, por supuesto, no encontró. De allí se trasladó al monasterio de Montserrat (Barcelona). El fraile que lo recibió, Andreu Ripoll, puesto que sabía alemán, expresó que Himmler buscaba el Santo Grial, llegando a afirmar que Cristo no era judío sino ario.
Como en muchas historias, al cáliz se le atribuyó poderes milagrosos de carácter curativo, capacidad para alimentar a miles de soldados y hasta poder devolver la vida a los muertos.
Cabe decir que surgió una fiebre por las reliquias religiosas o partes del cuerpo de algunos santos, a los que se atribuía supuestos poderes milagrosos, especialmente en tiempo de las Cruzadas, lo que provocó su falsificación a precios desorbitados.
[continuará]
J.A.T.
Agradecimiento foto cabecera: PaulT (Gunther Tschuch) – CC BY-SA 4.0
